Linfedema: los mejores tratamientos y recomendaciones

El sistema linfático es un sistema accesorio de la circulación. En el sistema circulatorio tenemos un sistema arterial, que lleva la sangre a todos los tejidos, y un sistema venoso, que recoge de los tejidos la sangre para llevarla al corazón. Por otra parte está el sistema linfático, que es un sistema de retorno que lleva el líquido que se queda en el tejido a otras células que son capaces de absorberlo. Forma parte del sistema circulatorio y del sistema inmunitario ya que forma los anticuerpos para la defensa del organismo.

De manera general, este sistema está formado por capilares y vasos linfáticos (estructuras que transportan el líquido), colectores linfáticos (linfa) y ganglios (encargados de la absorción de fluidos).

La linfa es el líquido que trasporta el sistema linfático, la cual cuando se acumula y no puede ser evacuada forma un edema. Puede producirse en una de las extremidades ya sea brazo o pierna o en ambas extremidades (bilateral), aunque también hay casos de edema en tronco.

Tipos de edema :

Edema dinámico: El sistema linfático no está alterado, el problema está en alguna patología que tenga el cuerpo y haga que se acumule la linfa por no poder soportar la carga que lleva.
Linfedema: El sistema linfático está alterado y puede ser por alguna patología del organismo o por algún problema adquirido.
Otros tipos: lipedema, que es la acumulación de grasa en el tejido subcutáneo, y mixedema, el cual se ven alteraciones en la piel.

Uno de los casos más frecuentes que hay es el linfedema por extirpación de ganglios por procesos tumorales y en él nos vamodss a centrar ahora.

Signos y síntomas del linfedema:

Inflamación o hinchazón de una zona de una extremidad. Puede abarcar cualquier región del brazo.
Enrojecimiento o cambio leve del color de la piel.
Limitación del movimiento.
Sensación de pesadez del miembro por el peso.
Endurecimiento de la piel.

Tratamiento de Fisioterapia del Linfedema

La gravedad de un linfedema radica en que si no recibe precozmente y de forma continuada un tratamiento de reducción y mantenimiento, puede derivar en grandes complicaciones irreversibles. Desde la fisioterapia se aborda el problema realizando diferentes técnicas:

Drenaje linfático manual: masaje suave y no profundo (ya que los vasos linfáticos se encuentran cerca del nivel de la piel) donde se ayuda a evacuar el exceso de líquido linfático llevándolo a los ganglios para su reabsorción.
Vendaje multicapas: vendaje que ayuda a retener el líquido linfático después de haber realizado el drenaje manual. Se ponen tres capas de vendaje.
Medidas de contención: medias de compresión terapéutica, manguitos, guantes.
Presoterapia: drenaje mediante máquinas especializadas.
Hidroterapia: natación, baños de contraste.
Ejercicios y movilizaciones para ayudar y favorecer el movimiento linfático.
Tratamiento postural que ayuda al retorno.

Recomendaciones para personas que sufren Linfedema

Para que el linfedema disminuya y no empeore existen las siguientes recomendaciones.

Evitar heridas y pinchazos:
Cuidado con las tijeras a la hora de cortarse las uñas
A la hora de cocinar, precaución con las espinas del pescado
Utilizar un dedal para coser
Picaduras de mosquitos
Evitar quemaduras y vigilar productos que puedan irritar la piel.
No llevar puesto cosas que puedan generar presión como anillos, relojes, pulseras o ropa ajustada.
No coger peso. Ni ponerte el bolso en el plexo del codo.
Evitar focos de calor y exposiciones prolongadas al sol. No utilizar saunas.
Buena higiene e hidratación de la piel.
Utilizar desodorantes hipoalergénicos.
En pacientes diabéticos, la punción se debe realizar en el otro brazo.